Como influye la convivencia familiar en el desarrollo interpersonal de los niños

La primera educación que recibe un niño desde que nace la recibe en su hogar. Son los primeros 4 años, cuando generalmente los niños pasan el mayor tiempo junto a sus padres. Tiempo suficiente para empezar a mostrar los primeros hábitos, normas de la casa, disciplina y valores. Todo va surgiendo según su capacidad, pero siempre es importante seguir enseñándole cosas nuevas.
Esto no ocurre siempre a modo estricto de decir “hacer esto es malo” o “debes ser responsable”, simplemente se da de forma natural. Primero con el ejemplo y luego con lo que le das a entender con cada acción que realizas.
Así, por ejemplo, la hora de la comida es a las 12m ya tu hijo en automático aprende que la disciplina es comer a esa hora sin falta. De esta forma el niño aprende un sinfín de hábitos, disciplina y valores que ni te imaginas.
familia feliz

¿Dónde ocurre esto? En el hogar, junto a sus padres, compartiendo en familia. Su desarrollo socio afectivo e interpersonal lo fortalecen las experiencias con su entorno, principalmente lo que ocurre en la familia. Por lo tanto, una sana convivencia en el núcleo familiar ayuda a fortalecer el desarrollo integral de los niños.

Que enseña una buena convivencia familiar a los niños

Los niños se encuentran en un proceso de desarrollo y aprendizaje constante, basado principalmente en patrones de conductas que asimila de su entorno, asumiéndolos como su forma de actuar ante distintas situaciones.
Es a través de la convivencia familiar que un niño aprende nuevos patrones de conductas deseables como:

Tolerar a las personas de su entorno

Un núcleo familiar en conflicto permanente, tendrá menos oportunidad de enseñar tolerancia a los niños. La capacidad de coexistir en la familia es lo que más importa para ellos, así que, de no ocurrir, percibirá al mundo siempre en conflicto. No sabrá porque lo hace, solo reacciona a una edad donde apenas esta aprendiendo a controlar sus emociones.
Esto suele ocurrir en familias numerosas o con padres en proceso de divorcio o separación. Esta conducta intolerante, es externalizada por los niños a causa de los conflictos permanente.

Compartir en familia y con los demás

Crecer en familia sabiendo compartir formará a un niño bondadoso. No será egoísta como suelen criarse entre hermanos. Por eso, desde pequeños debes enseñársele a compartir, así sea un caramelo. Si como hermanos se crían juntos y con buenos valores, cuando adulto tendrán mejor interacción con las personas.
madre jugando con hijo

Apoyo incondicional de sus padres

La familia está para apoyarse unos con otros, donde todos sus miembros son importantes. El apoyo debe darse siempre ante cualquier circunstancia, no importa si hizo algo malo o si se comportó de forma inadecuada. Si el niño se siente mal de ánimo, molesto o feliz, debe sentir el apoyo incondicional de sus padres.

Imparte nuevos valores

Solidaridad, respeto, tolerancia, generosidad, empatía, humildad, amor, junto a un sinfín de valores, se inculcan con una convivencia familiar de calidad. Los valores serán los pilares que durarán para toda la vida, con la intención que sigan transmitiéndolos en un futuro a su propia familia.
niño jugando con dispositivo smartphone
El mal uso de dispositivos electrónicos desde edad temprana trae más consecuencias negativas que positivas

Olvídate de inculcar la cultura de la tv y dispositivos electrónicos que ahora se usan de niñeras.
Eso no es entretenimiento, a la larga se convierte en un mal hábito. Erróneamente ha sustituido el proceso de crianza y se olvida sostener una convivencia familiar de calidad.
Antes de irte podría interesarte leer más sobre los hábitos para fortalecer la convivencia familiar.
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